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Hacia el cero desechos en la moda y el textil

Las modalidades de producci¨®n y consumo insostenibles de los seres humanos abocan al planeta hacia su destrucci¨®n.

Los hogares, las peque?as empresas y los proveedores de servicios p¨²blicos generan cada a?o entre y de residuos s¨®lidos urbanos, que abarcan desde envases y equipos electr¨®nicos hasta pl¨¢sticos y alimentos. Lamentablemente, los servicios de gesti¨®n de residuos en todo el mundo est¨¢n mal equipados para hacer frente a esta situaci¨®n: 2.700 millones de personas carecen de acceso a la recolecci¨®n de residuos s¨®lidos y ¨²nicamente entre el 61 % y el 62 % de los residuos s¨®lidos urbanos se gestionan en instalaciones controladas. Los seres humanos debemos tomar medidas urgentes para hacer frente a la crisis de los desechos.

El D¨ªa Internacional del Residuo Cero de este a?o hace hincapi¨¦ en la necesidad de actuar en el sector textil y de la moda para reducir los residuos y avanzar hacia soluciones circulares. Hacia el cero deshechos en la moda y el textil.

El r¨¢pido crecimiento de la producci¨®n y el consumo de textiles se impone a los esfuerzos de sostenibilidad en el sector, causando graves repercusiones medioambientales, econ¨®micas y sociales, sobre todo en el Sur Global. La producci¨®n de ropa y, sin embargo, se producen de residuos textiles en todo el mundo. Esto equivale a un cami¨®n de basura lleno de ropa incinerada o enviada a vertederos cada segundo.

Abordar este reto requiere un cambio sistem¨¢tico basado en la producci¨®n y el consumo sostenibles y en soluciones circulares. Un enfoque de residuo cero es clave para esta transici¨®n.

Los consumidores podemos reducir significativamente el da?o medioambiental adoptando pr¨¢cticas como la reutilizaci¨®n, la reparaci¨®n y el reciclaje. Alejarse de la moda r¨¢pida e invertir en ropa de larga duraci¨®n y alta calidad no solo conserva recursos, sino que tambi¨¦n cumple los planteamientos tradicionales de sostenibilidad.

El sector privado textil debe asumir su responsabilidad y dise?ar productos duraderos, que puedan arreglarse y reciclarse, al tiempo que adopta modelos de negocio circulares que frenen la contaminaci¨®n qu¨ªmica, reduzcan los vol¨²menes de producci¨®n, utilicen materiales sostenibles y ayuden a reconstruir la biodiversidad. La innovaci¨®n y la responsabilidad deben guiar las estrategias empresariales.

Los gobiernos desempe?an un papel decisivo al hacer cumplir los sistemas de Responsabilidad Ampliada del Productor, regular los productos qu¨ªmicos nocivos, invertir en infraestructuras de reciclaje e incentivar modelos empresariales sostenibles para impulsar la transici¨®n hacia una econom¨ªa circular.

Mejorar la gesti¨®n de residuos y optar por soluciones previas a la producci¨®n

La prioridad urgente sigue siendo mejorar la recolecci¨®n, el reciclado y las dem¨¢s modalidades de gesti¨®n racional de los desechos.

Sin embargo, para resolver la crisis de los desechos, las personas deben manejarlos como un recurso. Esto implica reducir la generaci¨®n de residuos y adoptar el enfoque del ciclo de vida. Los recursos deben ser reutilizados o recuperados siempre que sea posible, y todo producto deben ser dise?ado para ser duradero y para su elaboraci¨®n se deben usar materiales de bajo impacto y en menor cantidad. Este tipo de soluciones en las fases iniciales de producci¨®n contribuir¨ªan a reducir al m¨ªnimo la contaminaci¨®n del aire, la tierra y el agua y a disminuir la extracci¨®n de los valiosos y limitados recursos naturales.

Lograr sociedades con cero desechos requiere que todas las partes interesadas se comprometan y tomen medidas en todos los ¨¢mbitos.

Por su parte, los consumidores pueden transformar sus h¨¢bitos de consumo, adem¨¢s de reutilizar y reparar los productos tanto como sea posible antes de deshacerse de ellos de manera ambientalmente adecuada. Los gobiernos, las comunidades, las industrias y las dem¨¢s partes interesadas deben mejorar la financiaci¨®n y la formulaci¨®n de pol¨ªticas, en especial porque la crisis de los desechos afecta de manera desproporcionada a los marginados, los pobres de las zonas urbanas, las mujeres y la juventud.

Antecedentes

El 14 de diciembre de 2022, la Asamblea General de las Naciones Unidas en su septuag¨¦simo s¨¦ptimo per¨ªodo de sesiones en la que se decidi¨® proclamar el 30 de marzo D¨ªa Internacional de Cero Desechos, que se celebrar¨¢ todos los a?os. T¨¹rkiye, junto con otros 105 pa¨ªses, present¨® la resoluci¨®n, tras la adopci¨®n de otras decisiones de alto nivel centradas en la contaminaci¨®n, como la resoluci¨®n de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente ¡°¡±.&²Ô²ú²õ±è;

El (PNUMA) y al (ONU-H¨¢bitat) organizan conjuntamente la celebraci¨®n del D¨ªa.

Como parte de esta campa?a, se invita a los Estados Miembros, las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas, la sociedad civil, el sector privado, el mundo acad¨¦mico, las mujeres, los j¨®venes y otras partes interesadas a participar en actividades destinadas a sensibilizar sobre las iniciativas nacionales, subnacionales, regionales y locales de cero desechos y su contribuci¨®n al logro del desarrollo sostenible.

Promover iniciativas de cero residuos a trav¨¦s de este d¨ªa internacional puede ayudar a que se lleve adelante todos los objetivos y metas de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, incluidos el (ODS 11) y el (ODS 12). Estos objetivos tratan el tema de los residuos o desechos, entre ellos la p¨¦rdida y el desperdicio de alimentos, la extracci¨®n de recursos naturales y los desechos de equipo el¨¦ctricos y electr¨®nicos.